Entramos en la recta final del Festival de Cine de Sevilla, con este octavo y penúltimo día, agotados por las tantas películas vistas pero haciendo el último esfuerzo para concluir el festival como se merece.
Mientras escribo esta crónica ya estamos en la jornada final del Festival de Cine Europeo de Sevilla, pero no adelantemos acontecimientos, en el octavo día solo asistimos a dos cintas, pero ambas seguidas en un maratón, así que por falta de contenido, rescataré también una cinta que vi con anterioridad y creo que es destacable, además de ser cine patrio.
Maratón Grotesco Palomitero
Interesante experiencia la que vivimos ayer, para un servidor inesperada pero muy disfrutable. Aunque no lo llamaría maratón realmente, solo son dos películas seguidas, y palomitas tampoco traía nadie, pero lo de grotesco igual sí que define muy bien el ambiente que se respiraba allí, en el buen sentido si es que esta palabra lo tiene. Todo el refinamiento que caracteriza a las proyecciones de este festival, disfrutando las películas en el más absoluto silencio, se transforma completamente en el Maratón Grotesco, donde más que una sale de cine parece que estemos en un campo de fútbol gritando a una pantalla en lugar de a jugadores y árbitro.
Esta es la idea de los propios organizadores del evento, que nos dieron una guía rápida de como hay que vivir la experiencia, decir «guarra» en cualquier momento, gritar «Bob» cuando quieres que muera alguien, y un sin fin de barbaridades que convierten las proyecciones en algo único, pero sobre todo, muy divertido. Escuchar a todo el mundo gritando al unísono «¡Bigotes!» no tiene precio.
Pero centrándonos en las películas, la primera se titula Canaries, nombre que aun no llego a comprender por qué es el elegido. Estamos ante una comedia de terror con tintes de ciencia ficción de lo más cutre, la película por sí misma es un bodrio, pero es la típica que viendo con colegas, sea buscado o no, te ríes con cada escena, por supuesto en el maratón no paramos de reírnos y gritar a la cinta.
La segunda y última obra del «maratón» es Double Date, la cual ya tuvo su paso por Sitges, y que le da un vuelco total a la anterior, esta sí es una comedia de terror con galones, igualmente nos reímos tanto o más que con la anterior por el ambiente de la sala, pero en cualquier aspecto es superior a Canaries y totalmente disfrutable en solitario, con amigos o borracho, como algunos llegamos a estar en la sala.
Recuperando una cinta interesante
La última película que trataré en la crónica es Fogueo, realizada por David Sainz y muchos de los ya conocidos en Malviviendo. Recomendada para todos los amantes de la famosa webserie, pues tiene un estilo muy continuista con lo que fue el gran estreno de David Sainz. Es cierto, que no tiene el mismo impacto que tuvo Malviviendo, pero de igual manera nos hizo pasar un muy buen rato, cargado de risas y aplausos durante el metraje. La cinta además es muy probable que nos llegue vía online de manera gratuita para que todos podamos disfrutarla más adelante.
Con esto concluimos la penúltima crónica del XIV Festival de Cine Europeo de Sevilla, y la última de un servidor. A continuación dejaré las crónicas de los días anteriores, no olvidéis revisarlas también: