Crítica de El día más feliz en la vida de Olli Mäki (2016): Redefinición del éxito

El día más feliz en la vida de Olli Mäki

Año: 2016 | Dirección: Juho Kuosmanen | Producción: Aamu Filmcompany / ONE TWO Films / Tre Vänner Produktion AB | Guion: Mikko Myllylahti | Fotografía: Jani-Petteri Passi (B&W) | Reparto: Jarkko Lahti, Eero Milonoff, Oona Airola, Joonas Saartamo, Olli Mäki, Mika Melender, Raija Maki, Joanna Haartti, Niklas Hyvarinen, Pia Anderosson, Deogracias Masomi, Jarmo Kiuru, Marko Wilskman, Shamuel Kohen, Antti Naakka | Género:  Drama. Boxeo | Duración: 92 minutos.

La representación del boxeo en el cine casi siempre ha sido manifestada desde la superación, la épica y la victoria. Aunque ese éxito vivido en el cuadrilátero nunca ha tenido prolongación fuera de él. Mientras que la inmersión en el deporte ha significado la cúspide, el desempeño cotidiano de la vida se ha traducido en derrota.

Desde Rocco y sus hermanos (Luchino Visconti, 1960), pasando por Toro Salvaje (Martin Scorsese, 1980) y terminando por la última obra maestra que ha parido el subgénero, Million Dollar baby (Clint Eastwood, 2004), por citar algunas de las obras más relevantes del séptimo arte en este terreno, el cine no había contado con un púgil tan paradigmático como Olli Maki.

El día más feliz en la vida de Olli Mäki es la antítesis de la competitividad y la heroicidad. Su director, Juho Kuosmanen, apuesta por un relato tierno y sosegado, en el que las miradas destilan vulnerabilidad y amor. Como en la gran mayoría de cintas de boxeo, el objetivo obvio es el título mundial. No así la preparación, el camino para llegar al éxito. Y, ¿qué es el éxito? ¿conseguir una victoria que ponga a tú país en el escalafón más alto del boxeo? El cine ha contribuido a que veamos como sinónimo de triunfo el vencer, el conseguir hazañas épicas para luego ser aclamados por las masas. Esa representación masiva de figuras hercúleas a lo largo de la historia del cine y, en general, de la cultura popular, ha distorsionado la realidad y consecuentemente han sembrado un mar de dudas en la psique humana: a veces queremos llegar a cotas que son improbables y ante las adversidades no estamos preparados para levantarnos de nuevo. En El día más feliz en la vida de Olli Mäki se ofrece una perspectiva diferente; un enfoque más terrenal al que nos estamos acostumbrados. Pero del que nos sentimos profundamente feliz.

Y la felicidad es el motor de esta historia. O mejor: el amor. De él brota un cumulo se sentimientos que cuestionan verdaderamente qué es el éxito. Y lo hace a través de una fotografía en blanco y negro, maravillosa, que hace de las escenas nocturnas una autentico deleite de ensoñación pasional. Kuosmanen deroga el subrayado de la épica y la figura cosificada en beneficio del hombre humanizado y la victoria existencial. La cinta dignifica aquellos valores que explican el acto de vivir , como el diálogo y el respeto, por encima de otros que hemos ido incorporando hacia la deshumanización.

http://https://www.youtube.com/watch?v=6jJTt7V0A98

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