Crítica Dime quién soy 1×05 (Movistar+, 2020) – con spoilers

Año: 2020 | Dirección: Eduard Cortés | Guion: Piti Español, José Manuel Lorenzo, Julia Navarro (Novela: Julia Navarro) | Música: Lucas Vidal | Fotografía: David Omedes | Producción: DLO Producciones, Movistar+, Telemundo International Studios. | Distribución: Movistar+ | Duración: 9 episodios | Reparto: Irene Escolar, Maria Pia Calzone, Pablo Derqui, Will Keen, Pierre Kiwiit, Oriol Pla, Stefan Weinert, Lana Vlady, Valeria Alonso, Juan Martín Gravina, Jochen Hägele, Sergi Martínez, Ciro Miró, Vasileios Papatheocharis, Jordi Planas, Anthony Rotsa, Alberto Ruano, Maximilian Anthony, George Mendel, Mariola Sanz, Matthias Zera | País: España

Dime quién soy

La quinta entrega de Dime Quién Soy aterriza en Movistar+ mostrando otra faceta de la política internacional. Tomando Berlín como escenario principal se dibuja el mapa de la Europa previa a la Segunda Guerra Mundial, que vemos a través de los ojos de Amelia.

Ver Dime Quién Soy

En el quinto episodio de Dime Quién Soy constatamos que las palabras de Albert James surgieron efecto en Amelia y los encontramos comenzando su andadura en Berlín. La capital alemana resulta ser toda una revelación en la vida de nuestra protagonista y, además, le depara dos especiales reencuentros que suponen un punto de partida en esta etapa. Desde el principio del episodio sabemos que su vida dará un giro de 180 grados, y acabamos confirmando que encuentra su norte.

Dime quién soy 01

El principal valor de este episodio está en el punto de inflexión que supone. La serie original de Movistar+ siempre había tratado temas políticos teniendo a su protagonista envuelta en todos ellos, pero ahora por primera vez los protagoniza por elección y no por circunstancias. Hasta ahora habíamos visto las consecuencias que la política tenía en la sociedad y ahora vemos cómo las decisiones se desarrollan a puerta cerrada, conociendo así el lado más teórico y estratégico de las relaciones internacionales.

Todos los personajes de Dime Quién Soy tienen inquietudes políticas que manifiestan desde sus diferentes posiciones, consiguiendo que tengamos una visión completa de las diferentes formas de participar en política. En este episodio en concreto vemos como lidian con sus principios personas que pertenecen a altas esferas y gozan de situaciones de relativo poder. Tienen recursos, contactos y forman parte de lo que podríamos llamar una élite intelectual, pero sus acciones les siguen exponiendo al peligro del fascismo.

Crítica Dime Quién Soy 1×03

El primer reencuentro de Amelia nos deja ver en qué punto se encuentra a nivel personal. Su conversación con Carla pone sobre la mesa algunas claves que resultan importantes para entender sus posteriores decisiones: no está enamorada de Albert y busca el rumbo de su vida. No cabe duda de que lo consigue. Recupera su independencia – si es que alguna vez la tuvo- al romper con el periodista, el único vinculo emocional y a su vez atadura que le quedaba. Renuncia a la estabilidad que le aportaba su unión en pro de la pasión y la entrega a la causa, recobrando la esencia que la empujó a Buenos Aires.

De la mano de la cantante retoma el activismo, recuerda porqué empezó todo. Formar parte de la salvación de la joven no solo despierta algo en ella, también le abre las puertas de la inteligencia británica. El espionaje la reafirma como nómada, su lugar está donde pueda ser útil y lo asume con gusto. Conoce de primera mano la realidad de un espía, actúa con conocimiento de causa, los riesgos y las posibles consecuencias en todas las facetas de su vida no la echan atrás. Después de años buscando su forma sumar parece haber encontrado al fin su cometido y su forma de aportar a los cambios políticos.

Crítica Dime Quién Soy 1×04

Su vida sentimental también vuelve a encenderse. El reencuentro con Max reaviva la ilusión que parecía perdida, los sentimientos que ya no creía que volvería a experimentar. Sus anteriores relaciones habían estado marcadas de una forma u otra por el compromiso. A Santiago la unió el compromiso familiar, a Pierre el político y a Albert James la lealtad. Sin embargo, Max supone empezar de cero, lo conoce en un momento de empoderamiento y en libertad.  Como dice Shakira dice en Pies descalzos, sueños blancos “el hierro siempre al calor es blando”, y eso les pasa a ellos. Dos personas aparentemente herméticas al amor y frías por sus circunstancias consiguen estimularse de nuevo.

A pesar de que Amelia recuerda que vivir es algo más que respirar, la culpa sigue presente en ella. Sus fantasmas la siguen acompañando y han dejado huellas que permanecerán para siempre. Al confesarse pone palabras a su dolor, lo exterioriza por primera vez y suelta un poco del peso que lleva a sus espaldas. La forma de hacerlo y la persona elegida vuelven a evidenciar su carácter consecuente, necesita contar su verdad, pero no va a hacer que nadie cargue con ella. Sus alas ya están reconstruidas, con este paso les quita el polvo y a partir de entonces, a volar.

Dime quién soy 02

La excesiva velocidad con la que se suceden los hechos juega en contra en este episodio. Vemos transcurrir más de un año en solo cuarenta minutos y a pesar de que se muestra la chispa que prende cada llama, los saltos son algo abruptos. La densidad de los tejemanejes políticos y la importancia de las decisiones de Amelia merecían más tiempo para que el espectador pudiera digerir y valorar el peso llegando a empatizar.

La quinta entrega de Dime Quién Soy traza un mapa mental de la realidad política internacional de la Europa previa a la Segunda Guerra Mundial. Desmenuza las alianzas, las conexiones y los temores de los países implicados y retrata lo que supuso el poder de Hitler en diferentes esferas. Nos deja a una Amelia empoderada, segura de sus decisiones y decidida a participar de forma activa en dejar el mundo un poquito mejor de lo que lo encontró. Y esto es todo, hacemos las maletas de nuevo porque nos vamos a Varsovia, nos va a quedar un pasaporte la mar de completo.