Ciclo Christopher Nolan: Dunkirk

Director: Christopher Nolan | Guion: Christopher Nolan | Música: Hans Zimmer | Fotografía: Hoyte van Hoytema | Reparto: Fionn Whitehead, Aneurin Barnard, Harry Styles, Tom Hardy, Mark Rylance, Cillian Murphy, Kenneth Branagh | Productora: Warner Bros Pictures, Syncopy, RatPac-Dune Entertainment, Canal +, Ciné +, StudioCanal

Ciclo Christopher Nolan

Después de una intensa filmografía que abarcaría las primeras dos décadas del siglo XXI, Christopher Nolan llegaría a su cúspide con Dunkirk, uno de los ejercicios cinematográficos más únicos de la historia del cine.

Por muy impactante que pueda resultar, desde los años 90 solo han habido dos directores de cine capaces de integrarse en el imaginario popular: Christopher Nolan y Quentin Tarantino. Ambos cuentan con su particular legión de fans y sus estrenos son acontecimientos sumamente esperados, comentados y analizados. Ningún director al margen de estos dos se ha acercado a un nivel de tal popularidad entre el gran público en los últimos 30 años. Dunkirk es, hasta la fecha y a la expectativa de lo que sucede con Tenet, el último estreno de Nolan.

Desde el día en el que Dunkirk apareció en las carteleras del mundo entero polarizó a los fans; tónica habitual del cine del director de Inception, Interstellar o The Dark Knight. Hay quienes aseguran que es una cinta aburrida, lenta, previsible y nada emocionante que supone un bajón considerable en la filmografía de Nolan. Por otro lado, hay quienes la catalogan como una de las grandes obras maestras del siglo XXI, la mejor película de Nolan y la injusta derrotada de los Oscars de 2017. En mi caso en particular, me sitúo en estos últimos.

Dunkirk (2017) | nathanzoebl

El cine son experiencias que jamás podremos vivir y que solo podemos disfrutar a través de una gran pantalla en la oscuridad de una sala enorme. Dunkirk coge esta idea y la lleva a cabo con una de las grandes facturas técnicas de la historia del séptimo arte. Nolan, celebérrimo detractor de los efectos especiales rodados en plató, nos traslada, literalmente, a las playas de Dunkirk para ubicarnos en uno de los momentos más tensos de la Segunda Guerra Mundial. A través de tres líneas temporales (seña inconfundible de Nolan), Dunkirk narra una historia sobre la belleza que reside en la derrota. Tierra, mar y aire. Tres espacios donde la guerra acecha como un terror omnipresente e imprevisible.

La experiencia que ofrece Dunkirk es absolutamente inmersiva. Todos los apartados técnicos (especialmente la brutal banda sonora y la preciosa fotografía) sustentan algunas de esas escenas que se quedan impregnadas en tu retina y no se te olvidan en la vida. El primer ataque a la playa donde se cobijan los desamparados soldados o la asfixiante escena del torpedo atacan salvajemente la tranquilidad del espectador.

Si hay algo que represente a Dunkirk, eso es la escena de «the oil». La secuencia donde las tres líneas temporales de la película colisionan es puro éxtasis cinematográfico. Hemos presenciado numerosas escenas realmente apoteósicas a lo largo de 90 minutos, pero lo que vemos en esta escena es diferente a todo lo que hemos visto antes. El despliegue audiovisual es apabullante.

Llévame a casa: Dunkerque, de Christopher Nolan – Tiempo de Cine

Tres años y un confinamiento después, Nolan se dispone a dejarnos con la boca abierta otra vez con Tenet, su nuevo blockbuster de autor. Esta vez protagonizado por John David Washington y Robert Pattinson, el nuevo título que aspira a ser seguir alzando el nombre de Nolan deberá esperar, por lo menos, un mes más para que los espectadores del mundo entero pueden confirmar o echar por tierra sus expectativas. Viendo los precedentes y su clara línea ascendente, podemos estar tranquilos.