Mundo Doble, la última producción china que nos ofrece Netflix en su estreno mundial, exceptuando China, donde se estrena en Iqiyi.
Mundo Doble es esa película que Wandering Earth no pudo, aquel primer blockbuster chino que plantara cara a las mega producciones estadounidenses, y que acabó decepcionando a muchos. Con un presupuesto de menos de 45 millones de dólares, Teddy Chan consigue realizar una película que le habla de tú a tú a los mejores éxitos de la taquilla de Hollywood.
Antes de nada, es bueno saber que el imaginativo y original mundo que vemos en pantalla no es original. Mundo Doble es una adaptación del MMORPG de nombre homónimo de Giant Network. Un universo interesantísimo y bastante original. Mezcla la magia y extrañas criaturas gigantes en un mundo dividido en dos territorios a punto de estallar en una guerra. Personajes, tramas, incluso los escenarios donde transcurre la historia son dignos de alabar. Es fácil que el mundo que vemos en pantalla, completamente chino, pueda recordarnos a lo visto en otras producciones de la época de los tres reinos, fantasía aparte.
La trama, aunque sencilla, se hace muy interesante, gracias al buen hacer del director y un guion bastante correcto. Al sufrir el rey del sur un intento de asesinato, su corte organiza un peculiar torneo de artes marciales, para así elegir al líder del ejército que comandará las represalias contra el vecino norteño. Se convoca a los diferentes clanes del territorio para que presenten a sus mejores luchadores al torneo. Es en ese momento donde entran en escena nuestros protagonistas como representantes de su clan.
Así que de entrada tenemos un torneo de artes marciales dentro de un universo original y llamativo, magia, dragones, escorpiones gigantes, plantas asesinas, intrigas palaciegas, infiltrados en el bando rival, batallas multitudinarias, persecuciones a caballo y ritmo, mucho ritmo y acción. Ingredientes suficientes para llamar la atención de cualquier espectador, pero esto no es todo.
El director, Teddy Chan, experto director de genero de acción (no dudéis en echarle un ojo a Kung Fu Jungle y Bodyguards and Assassins). Mantiene un ritmo alto en el que casi durante toda la cinta están pasando cosas interesantes. Dando el descanso justo a la acción para tampoco saturarnos y profundizar en la relación de nuestros protagonistas. Un ejemplo del buen hacer del director y del guion lo vemos en la primera escena en la que aparecen los protagonistas. Un momento de pura acción, con el que consigue mostrarnos qué clase de persona es cada uno. Una película de aventuras en la que tampoco se ablanda en el momento que toca ser violento y cruel, aprende Hollywood. En la guerra no hay compasión.
A nivel técnico es verdaderamente sorprendente. Tengo que reconocer que me he encontrado con la boca abierta en varios tramos de la película. Que con este presupuesto se consiga este nivel de efectos especiales es algo difícil de creer (medios especializados chinos comentan que el 80% de lo que se ve en pantalla son FX). Vestuario, fotografía y música impecable.
El reparto que lo componen Peter Ho, Chenhan Lin, Luxia Jiang, Chung Him Law, Ming Hu, incluido el conocido cantante de K-pop Henry Lau. Notables, muy metidos en sus personajes, son creíbles y dan la talla en los momentos de acción.
En el apartado marcial, con Wei Tung a la cabeza, colaborador habitual del director en películas de este género. Nos ofrece unas escenas muy espectaculares, con algo de cable en momentos puntuales de las luchas y muy diferentes entre sí. Donde el propio entorno juega un papel importante. No entraré en más detalle para no destriparos las sorpresas. Si hubiera que ponerle alguna pequeña pega a este apartado, es que un montaje con menos cambios de perspectiva y manteniendo más tiempo las tomas, permitiría que nos pudiéramos deleitar un poco más con estas escenas.
Hasta ahora todo han sido alabanzas, me atrevería a decir que es el Blockbuster con el que más he disfrutado este 2020. También, lógicamente tiene sus puntos negativos o mejorables. En algún momento sufre de lo que yo llamo el síndrome Star Wars. en un mundo tan grande y extenso se encuentran y coinciden demasiadas personas con antiguas cosas en común. También he tenido la sensación de que, en uno o dos momentos, algún personaje toma una decisión poco coherente. Y algún momento en el que se verbaliza de más una situación o pensamiento que ya es evidente mirando la pantalla. No dejan de ser detalles habituales en este tipo de producciones.
Sin más, quiero recomendaros encarecidamente que veáis esta película. Puede que no os guste tanto como a mí, que ha sido muchísimo. Os divertiréis si no esperáis más que adentrarte en otro mundo y pasar dos emocionantes horas sin ganas de mirar la pantalla del móvil ni un solo momento. Esperemos que la vía que abrió Wandering Earth y ha aprovechado Teddy Chan con su Mundo Doble nos siga ofreciendo blockbusters son un sabor diferente al habitual.