All American «nueva» serie teen, creada por CW, disponible en HBO España. La serie se centra en la vida y milagros de Spencer James, jugador de fútbol americano en South Crenshaw.
¿Por qué empecé a verla?
Realmente me topé con All American un poco por hastío y por que no sabía muy bien que ver. Una amiga me recomendó una serie con nombre similar -que tras pasar 10 minutos ya supe que no era esta- y me puse a verla.
Fue de noche, un día entre semana, de madrugada tal vez. Maldigo ese día y los venideros que me hicieron disfrutar/perder tantas horas de mi vida en tal serie.
El comienzo
Una vez comenzado el primer episodio te quedas pensando: que bien, parece interesante, seguro que tiene algo que contar, sale en HBO. Terminado el primer episodio piensas que ya has visto toda la temporada sin ni siquiera haber empezado el segundo.
Y, ojo, lo peor es que tiene dos temporadas, no me quiero creer como será si segundas partes nunca fueron buenas. Aunque nada te sorprende en All American. ¡Encima van A POR LA TERCERA!
No extrañe que esto se convierta en la nueva historia interminable al estilo The Walking Dead, aunque ello sería difícil. Honestamente, no hay nada peor que esa serie a día de hoy, ni cualquier turra de siesta dominguera de Telecinco les supera, si es que siguen emitiendo películas a día de hoy y no es todo realities y cotilleo.
Basada en una historia original
Hoy en día todo está basado en una historia original, basado en un cómic, basado en un bestseller o inspirado en el libro de Ana Rosa Quintana.
All American no se queda atrás, así te lo recuerdan en cada capítulo y, si fuera oportuno, creo que hasta los personajes te lo recordarían cada 15 minutos de metraje.
Sinceramente si la historia original fue así, Spencer, todo mi apoyo por haber permitido la creación de esto…


¡Qué pedazo de historia!
All American cuenta la historia de un chaval que consigue salir de un barrio marginal para triunfar en Beverly Hills. La historia en sí misma está trilladísima, repetitiva, pero aún así, estrujándola, puede estirarse un poco cual chicle boomer. Y así lo hacen, bueno, lo intentan.
Resultose que Spencer, jugador de fútbol a tiempo completo y empollón a tiempo parcial -o cerebrito, según sus allegados-, afroamericano -negro, mucho-, con un padre que nunca llegó a conocer, dependiente de madre soltera que no llega a fin de mes, un hermano pequeño pinta de resabidillo y con amigos que tienen lazos con bandas, es escogido por un tío, que casualmente, le ha visto jugar un partido, y le ha dejado poco menos que estupefacto, al verle. ¡No hay mejor jugador en toda América! Nos hacen pensar.
La historia no acaba aquí. Ahora vienen los crossovers entre un barrio marginal y un barrio pijo de Los Ángeles, esa ciudad cosmopolita. Vienen las escenas clichés de género por religión, por prejuicios, etc. Ah, y también hay líos, muchos líos con mucho amor y muchos corazones rotos y a la par que ilusionados. Podría rellenar tres páginas de esto con spoilers, pero vamos a dejarlo aquí, sin perjuicio de que se me escape alguno más.
Que ver en Netflix, HBO, Prime Video, Disney, Filmin – 12 de junio
La nueva normalidad
Ya entrada en carnes la serie, encendido el motor, pasados los primeros episodios, All American se convierte en una serie teen más.
Que si basada en historia real, que si historia conmovedora, que si vaya ejemplo de superación, tete. No, una historia más, que no os vendan la moto, o la serie en este caso.
Las interpretaciones
Podría poner mil y un ejemplos, pero os voy a chafar la fiesta si os decidís a verla. En especial resaltar la interpretación de Laura Baker, la madre de varios de los protagonistas. Dejaría en buen lugar a cualquier actriz mala o muy mala española. Muy forzado.
Por lo general, más y más cliches. Raperos afroamericanos pertenecientes a bandas con gorra hacia atrás, giros de guión más que esperados, prejuicios y más prejuicios, etc. Eso sí, interpretados por actores de 22-30 años haciéndose pasar por teenagers de ¿17? ¿16?. Lo típico de las series de The CW.
Oye que no todo es malo, que también hay una banda sonora decente de rap y trap.
En resumen
All American engancha, y mucho. Todavía me acuerdo como me enganchaba Gossip Girl, o Sálvame aquellos días que no tenía nada que hacer -aunque al final acababa por dormirme la siesta con Jorge Javier de fondo-.
En este caso esta engancha para bien, como la heroína, como unas patatas fritas una vez que abres la bolsa, como el sabor helado de leche merengada -probadlo si no lo habéis hecho ya, me lo agradeceréis-.
Esto no quiere decir que sea buena, para mí es bastante mediocre. Hay algunas series del estilo que están bastante mejor -si queréis mi opinión, dejadme comentario al respecto-.
Ni se os ocurra fijaros en la puntuación de IMDB, ese 7.8 a día de hoy debe estar hecho en base a fanboys que viven por esta serie, tienen pósters de los protagonistas y rezan para que se junten en la siguiente temporada y así llevar a la plenitud sus mundanas vidas. Por Dios, The Walking Dead tiene casi más de un 8 después de 11 jodidas temporadas…
En resumen, yo no la recomendaría, pero igual que el tabaco: es un vicio, no recomendable y la gente, aún así, fuma. ESO SI, si alguien os la recomienda y os dice lo siguiente: «Es una serie muy buena»; alejaos, o bien está mal de la cabeza o bien bajo los efectos de las drogas DURAS.