Twin Peaks 3×03 y 3×04 ‘El Regreso del Mito’: Descenso aberrante

Twin Peaks

Tras dos primeros episodios tan confusos como encantadores, Twin Peaks regresa a nuestros hogares para brindarnos otras -casi- dos horas del David Lynch más valiente y provocativo.

Twin Peaks 3×03 y 3×04 ‘El Regreso del Mito’: Todavía hay música en el aire

Tras regresar el pasado 21 de mayo con prácticamente dos horas igual de confusas como prometedoras, Twin Peaks vuelve con grandes dosis de surrealismo y ese humor tan caricaturesco que tuvieron las dos temporadas estrenadas allá por 1990-91. Y es que nadie diría que David Lynch, el genio de Montana, llevaba más de diez años sin estrenar nada relevante, todo lo contrario.

De esta forma, el capítulo 3×03 irrumpe con 25 minutos de auténtico surrealismo, supeditados por una narración llena de juegos temporales, personajes inverosímiles -mucho ojo a la mujer con los ojos tapados-, simbolismo e incluso guiños para los fans. Mark Frost David Lynch tienen muy claras las directrices a seguir para enganchar a los seguidores más acérrimos, y por ello han querido dotar a cada secuencia de pinceladas del pasado para mantener esa esencia original que tan característica hizo la obra. Sin embargo, el seriéfilo recién llegado puede verse sorprendido ante esto y, probablemente, asustado… pero ya sabemos cómo se las gasta Lynch y su apuesta por hacer, simplemente, lo que le de la gana. 

Tras estos primeros minutos, en los que el agente Dale Cooper parece haber conseguido salir de la Habitación Roja y volver al mundo de los humanos, cobran protagonismo dos elementos que serán claves durante el transcurso de estos dos episodios:

  • La trampa del doppelgänger de Cooper: Los dos primeros episodios nos demostraron que el Cooper malo no ha estado perdiendo el tiempo, e incluso ha podido elaborar un maquiavélico plan para no abandonar el mundo que habita -y no le corresponde-, y es que no debemos olvidar que para que nuestro querido protagonista regresase él debía volver a la Habitación Roja. Cosa que no ha sucedido.
  • ¿Un tercer Cooper?: Y de aquí parte lo llamativo de este plan: un tercer personaje interpretado por Kyle MacLachlan, de características muy diferentes a los dos vistos con anterioridad. No revelaremos nada, para evitar caer en los sórdidos mundos del Territorio Spoiler, pero la expresión «¡HelloooooOOOOOooooo!» os enamorará de la misma forma que nos ha encandilado. Además, valga lo citado anteriormente, habrá un regreso de un elemento inesperado: Garmonbozia, el alimento de la Logia Negra.

Tras este inicio rompedor, el capítulo apuesta por regresar a un enfoque más próximo a lo visto en las dos horas anteriores, con unas tramas pausadas; narradas con mimo y templanza.

Es en el Episodio 3×04 donde la ficción apuesta por hacer honor a nuestra nostalgia y nos brinda secuencias más próximas a la obra original que a lo visto en esta nueva etapa. Regresa el café, los donuts y, para sorpresa de todos, una de las melodías clásicas de la serie original acompañada de un personaje que muchos queríamos ver -con un oficio de Sheriff que nadie se esperaba-. Andy y Lucy volverán a derrochar esa simpatía y amor que tanto los caracterizaba y, sorprendentemente, Cooper vivirá una de las amnesias que tanto le han gustado a David Lynch a lo largo de su carrera cinematográfica, supeditadas en escenas humorísticas que recordarán, y mucho, a la Twin Peaks que tanto nos gustó.

Y, si estos regresos os pueden saber a poco, la llegada de Gordon Cole -tan duro de oído como acostumbra- y su inseparable Albert llegarán para poner la guinda a esta doble emisión. ¿Blue Rose?

Por último y, evidentemente, para dar carpetazo a esta particular review, quisiera hacer alusión a un aspecto que puede determinar la resolución de la trama y que, además, los lectores de La Historia Secreta de Twin Peaks tuvimos la oportunidad de descifrar entre líneas (SPOILERS ACERCA DEL LIBRO Y POSIBLES DESTRIPES DE LA TRAMA): la posibilidad de que los seres de la Logia Blanca y Logia Negra no sean más que meros extraterrestres. Personalmente, dudo que David Lynch haya apostado por un recurso tan básico, ya que sus bondades como guionista van mucho más allá, pero las evidencias del libro y, sobre todo, cierta nave espacial del Episodio 3×03 inclinan este pensamiento. Esperemos que no sea así. 

¡Nos vemos en próximas entregas!