El Cid es la superproducción histórica que Amazon Prime Video trae este 18 de diciembre a nuestros hogares. Compuesta por tan solo 5 episodios, nos narrará los primeros compases de la vida de Rodrigo Díaz de Vivar.
El Cid se estrena hoy con la intención de cautivar a todos aquellos que disfrutaron de Isabel o de la reciente Hernán, pero lamentablemente no cuenta ni con la calidad de la primera ni con los paisajes y sets de la segunda. Aun así, logra ser un entretenimiento de tan solo 5 episodios que se pasa rápido y no deja un mal sabor de boca.
El Cid está claramente pensada para múltiples temporadas, ni siquiera se han molestado en ocultarlo. La serie no tiene un final cerrado y apenas abarca unas semanas de la vida del protagonista, lo que impide que podamos ver numerosas batallas épicas pero logra que conozcamos de una forma más cercana a la persona detrás del mito, a Rodrigo Díaz, interpretado por Jaime Lorente (La casa de papel, Élite), así como a todo el gran elenco de secundarios que van desde la Infanta Urraca interpretada por Alicia Sanz (#RealityHigh), hasta su futura mujer Jimena, interpretada por Lucía Guerrero (El Continental).
En mi opinión, las interpretaciones son correctas pero no se salen del estándar nacional actual, aunque he de decir que Jaime Lorente me ha encajado más como el Cid de lo que pensaba cuando se anunció su casting. En cuanto a los escenarios, si bien son adecuados no se sienten muy diferentes a los de cualquier otra serie histórica española que podamos haber visto. De estos, la mayoría son reutilizados en casi todos los episodios y, salvo el viaje a Zaragoza, resultan totalmente insulsos.
Poca acción para ser El Cid:
Las escenas de acción son pocas, lo que puede que sea el punto que más me ha decepcionado de la producción. Es cierto que hay algunas escenas de justas que alivian un poco la falta de acción, sin embargo, solo veremos una batalla en toda la serie que, aunque cumple, no supera las expectativas. Los planos cortos están bien realizados, quizás se abusa de la cámara y el tembleque de ésta, pero en general tanto las coreografías como la dirección de figuración logran su objetivo. Por otro lado, he echado en falta algún plano general épico de la batalla, puesto que tan solo vemos el campo de batalla al completo antes de que ésta comience, una vez inicia ya solo somos testigos de pequeños fragmentos de la crudenta lucha que se libra. Ni siquiera cuando hay personajes observando la contienda vemos grandes planos desde su punto de vista.
Otro punto en contra son sus efectos. Sin contar con que las escenas de batalla probablemente cuenten con ellos y son invisibles (lo que es una buena señal), se ven muy falsos cuando se nos muestran grandes planos de una ciudad, casi al nivel de parecer una cinemática de un videojuego. Este hecho no afecta a la trama, pero sí dificulta la inmersión y amenaza al realismo de la serie.
En cuanto a la historia, no quiero entrar en detalles para evitar spoilers, pero tampoco nos encontramos con un elemento revolucionario que busque cambiar la manera de narrar hechos históricos, simplemente lo hace con normalidad y de forma pausada.
En resumen:
Quizás he sido demasiado duro con El Cid, pero es porque creo que era un producto con potencial que se ha quedado en una serie histórica más. La serie es corta, se ve en un par de sentadas y no se hace pesada, tiene escenas entretenidas y algunos personajes carismáticos, pero si esperas descubrir tu nueva serie favorita creo que estás en el lugar equivocado.