Este artículo es una crítica de la nueva serie Eden, que se estrena en Filmin el próximo 21 de Abril. Es complicado hablar sobre la crisis migratoria que se está viviendo en el mundo. En concreto, esta serie aborda, desde tres puntos de vista coetáneos, lo que viven los refugiados o inmigrantes ilegales que llegan a las costas europeas.
Lo primero que voy a decir es que no voy a valorar con una nota la serie Eden. Creo que haber vivido los dos últimos capítulos con un nudo en la garganta son suficiente para mí. No es la mejor serie que he visto, no es perfecta. Tiene algunos fallos de ritmo, sobre todo al principio, pero hay algo que creo que la hace única.
La serie Eden, dirigida por Dominik Moll tiene una virtud, y es que, tanto el apartado técnico y la banda sonora, acompañan el poderoso mensaje que tiene su historia. Se quedan en un lugar apropiado, como herramienta para transmitir, sin llegar a ser protagonistas de ninguna escena, pero alcanzando cotas de calidad muy altas.
Uno mismo piensa que no tiene ciertos estigmas, uno no se considera racista ni ignora la miseria en el mundo. Esta serie no va a cambiar la percepción que tienes de ti mismo, pero no prometo nada, al menos no lo hizo conmigo. Lo que sí hará esta serie será enseñarte la realidad desde los puntos de vista fundamentales que, en mi humilde opinión, hacen de esta pequeña obra audiovisual una crítica social de las más duras y crudas que he podido ver. Las tres tramas argumentales que aborda la serie se basan en estos puntos de vista. No voy a hacer ningún spoiler de la serie, pero sí que voy a hacer un pequeño comentario, que no sale más allá del primer capítulo.
El precio de la vida
Eden muestra el negocio que hay detrás de la miseria humana. Podrás deleitarte con cómo los gobiernos mercadean con el sufrimiento humano, lo usan como máscara de lo que ocurre realmente. La asistencia básica, los recursos, las ayudas sociales… Todo esto requiere de una inversión económica, pero el problema recae en que siempre hay alguien invisible moviendo los hilos para ganar más y más.
Hablamos de crisis mundial cuando el sistema financiero quiebra, cuando las cuentas no salen. Hablamos de crisis humana cuando se pasa de un estado de bienestar a un estado donde no se puede asegurar lo más básico para la vida. Según datos de ACNUR hay 25.9 Millones de refugiados y 3.5 Millones solicitantes de asilo. Según elPeriódico, bajo fuentes del Observatorio Sirio por los Derechos Humanos (OSDH) hay 380.000 muertos, de los cuales 115.000 son civiles, en la guerra en Siria.
La familia
Otro aspecto que aborda la serie Eden es el papel de la familia. Detrás de cada persona inmigrante, de cada refugiado, hay una familia. Personas que han apostado todo su dinero para que los jóvenes puedan tener una vida mejor.
Navegar en una patera por el Atlántico, en una balsa que está a punto de volcar con cada ola, saber que puedes morir en cualquier momento y ver morir a tus compañeros de viaje: médicos, ingenieros, abogados, albañiles, profesores, niños. Tan solo el hecho de pensarlo me sobrecoge. Es una experiencia aterradora a la que se someten, porque el sacrificio «vale la pena». Cuando la familia lo es todo y mueren en una guerra, asesinados por el régimen de tu país, torturados y fusilados por no ser partidario de su ideología, lo único que te queda es esconderte o huir.
Crítica de Pure (Filmin): Tragicomedia en estado puro
Olvidamos fácilmente que detrás de cada número hay una persona, como tú y como yo, con una vida, una familia. Buscan ayuda de forma desesperada y el sistema se la da, pero se convierten en ganado.
El Edén
Este 2020 nos ha traído ya muchas sorpresas a todos. Somos afortunados de lo que nos está pasando, no por los enfermos, no por los que ya han muerto o van a morir. Ahora. más que nunca, podemos ser conscientes de que nuestro mundo, nuestro concepto de normalidad, nos aleja del concepto de humanidad. Ahora somos conscientes de que somos frágiles, somos de carne y hueso, seguimos siendo seres vivos que echan un pulso a la naturaleza, y esta nos va ganando. Espero que esta situación termine haciendo el menor daño posible.
Al mismo tiempo, creo que es el momento de hacer un pequeño parón en nuestro egocéntrica forma de vida y empezar a darnos cuenta de que los problemas, aunque seamos conscientes de que están ahí, pueden tener una solución, pero no hacemos suficiente para acabar con ellos.
Nunca me había sentido así con una serie o película. Es extraño poder ver algo tan real, tan cotidiano y a la vez tan lejano y extraño. Sinceramente, te recomiendo ver la serie Eden, no cambiará tu vida, pero puede que sí tu forma de actuar y con ello cambiemos, ahora sí, la vida de los que necesitan ayuda.