La Noche más larga es la ambiciosa apuesta por el cine de acción carcelario que nos llega este viernes 8 de julio de la mano de Netflix. Cuenta con reputados actores al frente de su elenco como Luis Callejo o los ganadores de Goya, Alberto Ammann (por Celda 211) y Roberto Álamo (doblete por La gran familia española y Que Dios nos perdone).
La Noche más larga nos sitúa en el día de Nochebuena, cuando el asesino en serie apodado El Caimán (Luis Callejo) es apresado por la policía. Deciden trasladarlo a un ficticio complejo penitenciario psiquiátrico llamado Monte Baruca, lugar donde se desarrollará la miniserie casi por completo.
Debido a esta situación de máxima seguridad, Hugo (Alberto Ammann), el director de la prisión, ha de posponer sus planes de cena familiares y acudir al centro penitenciario de forma inmediata, llevándose con él a sus dos hijos pequeños. Al poco tiempo de llegar la familia a Baruca, irrumpen en el exterior de la prisión un grupo de hombres armados hasta los dientes con la intención de sacar al Caimán por los medios que hagan falta, pero Hugo no está por la labor, no en su turno.
Lo primero que tengo que decir, y dejar claro, para que no haya malinterpretaciones, es que La Noche más larga es un producto de alta calidad. El montaje y dirección están a un nivel notable, cuanto menos, y dota a la serie de un ritmo y atmósfera de nerviosismo constante. El uso del sonido es bastante acorde con la narrativa y la enfatiza sin quedar por encima en ningún momento.
El elenco rinde a cotas elevadas en su mayor parte, sobre todo el gran Luis Callejo, actor que me encanta, que siempre está perfecto, con esa tonalidad de voz áspera y ese ritmo parsimonioso, me encandila, uno de mis actores españoles favoritos. Roberto Álamo, en su salsa, lástima que su papel no tenga mucho peso. Y Alberto Ammann, que si no fuera por el final de su personaje en Celda 211, podríamos decir que ambos productos pertenecen al mismo universo y esta serie pudiera ser la secuela de aquella, transcurridos unos años de por medio.
El guion no es que sea una maravilla, ni mucho menos original, que ahora documentaremos este aspecto, pero no podemos negar que tiene mucho atractivo. Hacer una serie en el que el tiempo transcurre prácticamente a la par que en la realidad, con el asalto de una prisión de por medio, seduce, y mucho. Esta premisa, con ligeras variaciones, se viene haciendo desde el cine clásico.
En Río Bravo (1959) de Howard Hawks teníamos a un sheriff (John Wayne ni más ni menos), que debía evitar el asalto de su comisaría para que no se llevaran a un reo (Claude Akins) que tenía retenido. Es una de las películas más influyentes y copiadas de la historia del cine. Ya Howard Hawks se autoremakeó (toma término neoacuñado, toma otro) en El Dorado (1967) e incluso también me atrevo a decir que en Río Lobo (1970). John Carpenter llevó la historia a su tiempo con la muy celebrada, Asalto a la comisaría del distrito 13 (1976), película que obtuvo su remake directo en el 2005 con el filme Asalto al distrito 13, protagonizado por Laurence Fishburne y Ethan Hawke. Recomiendo todas ellas, eso sí, consuman con moderación, no se me atiborren de asaltos a comisarías.
Ahora bien, si nos atenemos a la idea comercial, hemos de aludir a uno de los productos españoles con más éxito mundial de los últimos tiempos, La Casa de Papel. Lanzo mi osada predicción, Netflix quiere repetir éxito con La Noche más Larga. Si ya esta idea te ronda la cabeza mientras estás inmerso en esta temporada, debido a la gran calidad y potencia de enganche del producto, cuando llega el final es imposible no pensar en ello. Y es que el final no es tal, sino que te deja bastante a medias, con un cliffhanger bestial, tienes que ir al menú de la serie para comprobar que, en efecto, se ha terminado esta primera temporada y te preguntas… ¿Qué entienden por miniserie esta gente?
Aún así, el camino es gratificante, si hemos de comparar con La Casa de Papel, veo menos carencias en esta serie que nos ocupa. Al menos me parece que los fallos de aquella en esta son menos considerables, de menor cuantía. Menos romances instantáneos anodinos, menos paja y más grano en general, y sobre todo unos actores de una calidad bastante superior. Disfruten de esta serie, creo que va a ser un bombazo y va a dar que hablar. Espero sus comentarios amigos y amigas.
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