Culpable es el estreno estrella de este fin de semana de la plataforma de streaming de Netflix. Un thriller policíaco contado desde un teléfono de escritorio de un agente del centro de llamadas de emergencias de la policía de Los Ángeles. Un nuevo remake a cargo de Antoine Fuqua, y si las cuentas no me fallan, es el tercero del director.
Culpable comienza situándonos en una ciudad de Los Ángeles cercada por las llamas de un enorme incendio forestal. La película enseguida nos centra en el agente Joe Baylor (Jake Gyllenhaal), un policía al que han degradado a un puesto de atención telefónica del célebre 911, el número de emergencias en Estados Unidos. Joe empieza a atender una llamada en la que una mujer parece haber sido raptada por un hombre. Es el último día de Joe en la centralita, antes del juicio que tiene pendiente, pero este no será un día como cualquier otro.



Antoine Fuqua es uno de los mejores directores «comerciales» de acción de la actualidad. Títulos como Redención, The Equalizer, Shooter: El tirador, Objetivo: La Casa Blanca o Training Day son buenos ejemplos de ello. Pero también es ya un habitual «remakeador». Tras Los siete magníficos y The Equalizer, esta Culpable es el tercer remake en su haber.
Al haber visto la película original, la danesa The Guilty (2018), me es imposible no ponerla en comparativa con esta, además creo que es necesario. Me gustó bastante la original, llevaba la tensión desde el inicio del filme y no bajaba su ritmo prácticamente hasta el mismo final. La actuación del protagonista era contenida en líneas generales, fría, algo que a priori se puede pensar que es normal en una producción escandinava. Esto no suele ser mala noticia, pero sí que hace que la parte emocional no sea tan fuerte, somos de sangre caliente y nos es más difícil empatizar con sociedades más sosegadas.
En esta Culpable tenemos a un iracundo Jake Gyllenhaal, que puede parecer sobreactuado en ocasiones, pero que a mí me parece que está excelente en su papel de persona rota, con cambios de humor repentinos y mucha facilidad para entrar en cólera. Esto hace que a ratos nos pueda sacar un poco del filme, pero también creo que hace que sintamos ese personaje más cercano y lo podamos entender mejor. Este remake es más emocional que la original. Por contra me ha parecido que no es capaz de mantener a tensión como la otra, y sobre todo hasta mitad de metraje, tiene muchos pasajes que se hacen un poco pesados.



Culpable es un remake casi calcado de The Guilty. La mayoría de situaciones que se dan e incluso las frases que dicen los personajes son las mismas. El cambio sustancial no llega hasta su final y por lo que creo recordar no es que lo cambie por completo, sino que más bien algún fragmento está contado en distinto orden. Creo que cobra más fuerza emocional narrado en la forma en la que lo hace Fuqua y se torna más natural. Me parece buen remake, al menos bastante cerca de la calidad de la película original.
Así pues, Culpable es una película de esas de un único escenario, prácticamente sustentada en la labor interpretativa de Jake Gyllenhaal. Un buen thriller con giro efectivo, aunque podría tener un mejor ritmo en algunas partes, tampoco se puede pedir mucho más en este tipo de productos.