‘Wakanda Forever’ ha estrenado en cartelera, para fans del MCU, del buen cine y un homenaje al fallecido Chadwick Boseman. Marvel continúa su gran obra, manteniendo el giro de timón que ha supuesto esta fase 4. Una fase 4 que está pillando desprevenidos a muchos fans de la simplicidad que suponía el grupo de los Vengadores.
‘Wakanda Forever’ llega a la cartelera con el mismo espíritu que ya tenían ‘Eternals‘ o ‘Doctor Extraño en el Multiverso de la Locura‘, el espíritu del cambio. Desde el estreno de ‘Iron Man‘ en 2008, mucho ha cambiado en la manera de crear proyectos en el MCU. Partiendo de una base inspirada en la era dorada de Marvel, Marvel Studios nos trajo a tod@s l@s fans de los cómics historias centradas en los Vengadores. Historias simples, del bien contra el mal. Lo que ocurre es que ‘End Game’ era el inicio de muchos cambios que much@s fans y crític@s no quieren ni ver ni abrazar.
Desde que se inició la fase 4, el chasquido de Thanos ha ido dejando secuelas en el universo de Marvel, un universo que Kevin Faige y sus secuaces insisten en extender. ‘Chang Chi’ presentó el primer aviso: hay más culturas más allá de las occidentales, pero por lo visto, a demasiad@s mal llamados críticos del cine, les cuesta entenderlo. Desde Scorcese hasta Smith, hay un mundo de opiniones, pero esa diversidad de opiniones es la que rebate el principal argumento de los detractores del MCU. Se ha dicho que las películas de Marvel no son cine, y a partir de ahí los haters se han venido arriba.
‘Wakanda Forever’ es cine y del bueno, le pese a quien le pese. En esta crítica, con spoilers, desgranaremos la historia que nos quiere contar. Porque a fin de cuentas, el cine va de eso, de contar historias. La nueva incursión de Black Panther no es una película de super héroes al uso, y eso ha hecho que haya división de opiniones. Todas ellas válidas y respetables, por supuesto. Pero quien escribe es del bando al que le ha encantado la película, así que sino te ha gustado, o no la has visto, igual otra visión te puede atraer.
La película arranca con la muerte de T’Challa, rey de Wakanda, Black Panther, hijo, esposo y hermano. Esa es la principal premisa del film, es una introspección al luto desde dentro del MCU. Chadwick Boseman falleció a sus 43 años de cáncer de colon, y esta película es y será para siempre, un homenaje a su persona. Lo que ha conseguido la ficción, es que sea un homenaje a su personaje también, y ese es su gran logro aunque no el mayor.
Tras una dura entrada en el film, donde el silencio es el protagonista, los homenajes se suceden en una serie de escenas que llenan los ojos de lágrimas y encogen el corazón. Una tónica que se va a repetir durante las casi tres horas de duración que tiene. Cuando el dolor parecía que se apaciguaba en Wakanda, una nueva amenaza vuelve a poner en tensión a la mayor nación ficticia de África. Y es aquí donde la película se pone seria.
La aparición de Namor, rey, dios y regente de Talocan es un golpe en el mentón de las mentes colonialistas, imperialistas y occidentales. El ser humano, para quien aún no lo sepa, se ha dedicado a destrozar, expoliar y hundir a todas las civilizaciones, culturas, religiones y sociedades que no fueran blancas, católicas, apostólicas y romanas. Es una verdad como un puño, y ‘Wakanda Forever’ se encarga, de manera brillante, de recordar lo que nunca debe pasar al olvido.
Namor ( Tenoch Huerta ha llegado para quedarse, su interpretación es de primer nivel) , al igual que Ramonda (maravillosa Ángela Basset interpretándola), representan a todas esas culturas que Europa y Estados Unidos se han empeñado en querer empequeñecer a lo largo de su historia. Wakanda y Talocan, representan a todas esas naciones africanas y latinoamericanas a las que Europa y USA han robado durante siglos, a cambio de pan y circo. En esta lectura radica mi crítica positiva a esta película, en asumir desde una producción americana, el imperialismo salvaje.
Volviendo a la película, las naciones del mundo se mueven nerviosas en busca de Vibranium, un metal que promete usos militares de dominación mundial. Ante la negativa de Wakanda de seguir comercial con tan precioso metal, grandes corporaciones financiadas por gobiernos corruptos (¿a alguien le suena?) están destrozando suelo marino en su búsqueda. Es cuando despiertan al gigante dormido de Talocan.
Talocan es la versión de Marvel Studios de la Atlántida, la nación submarina que es leyenda y ha dado para miles de historias. Contadas en el cine. Como hemos dicho anteriormente, de eso trata el cine, de contar historias. Con mejores o peores guiones, planos y cromas, pero al final, todas las películas cuentan historias. La historia de Talocan, en el caso, es que se han mantenido tranquilos en sus profundidades, hasta que unos explotadores de recursos han venido a poner en riesgo su estabilidad.
Es colonialismo de primero de la ESO, naciones que se creen con el derecho sobre los recursos de las demás. Wakanda ya avisó, entregando a los mercenarios contratados por Francia (esa misma nación que se ha dedicado a lanzar bombas atómicas en el atolón de Mururoa ) y mandando un aviso: dejad nuestros recursos en paz. Es entonces cuando, la misma situación en aguas de Talocan, se resuelve de manera más violenta.
Haciendo honor a la eterna visión enfrentada de Magneto y Charles Xavier, Wakanda quiere mandar el aviso de manera pacífica, mientras Talocan aboga por medidas más radicales: hacer arder el mundo. Namor entiende la ira que hay en Wakanda, sobre todo en el corazón de Shuri, consumida por la rabia de la muerte de su hermano T’Challa. Por ello, pide a Ramonda que se unan ambas naciones contra el mundo de la superficie. Ante su negativa, Namor amenaza con hundir bajo las aguas a toda Wakanda.
Es entonces cuando empieza la acción en la película, criticada por tener demasiados momentos valle. Necesarios, pero que por momentos hacen que el film se haga algo pesado. La lucha entre Wakanda y Talocan centra la mayoría de un metraje que termina cumpliendo en su principal objetivo: es una película que honra no sólo a la persona, sino a toda la cultura africana. Las pinceladas de como afrontan el luto, la banda sonora o los bailes tribales, son una oda a un continente que no ha hecho más que sufrir a lo largo de la historia.
Marvel Studios no es ninguna ONG, ni seguramente tenga intención de cambiar el mundo con ‘Wakanda Forever’, pero está bien que mande un mensaje a través de la película: África no olvida, aunque el mundo la olvide, África perdona aunque lo que se le sigue haciendo sea imperdonable.
Volviendo a la película, hay ciertas cosas que no terminan de funcionar, en mi humilde opinión. El personaje de Riri Williams no termina de encajar, interpretado por Dominique Thorne, es Iron Heart, futura Young Avenger, científica fan de Tony Stark y pseudo Iron Man en esta entrega. Sus apariciones son bastante vacías, teniendo en cuenta que es quien desencadena la guerra entre Talocan y Wakanda. Veremos como evoluciona su personaje, pero claramente ha quedado en la sombra, también por lo eficiente que es la presentación de Namor.
Por otro lado, es cierto que la película es la menos super héroes del MCU, con algunos planos donde el CGI no termina de funcionar. Se trata de una historia de guerra entre dos naciones, pero que, de momento, deja su influencia en el MCU en el aire. Si bien la presencia de Namor hace que el término «mutante» sea ya una realidad en el universo cinematográfico de Marvel, se ha perdido la oportunidad de seguir ampliando la presencia de mutantes.
La sorpresa para mí ha sido la Black Panther de Shuri (Letitia Wright). Consumida por el dolor, quien le aparece en el plano astral es Killmonguer, y eso dice mucho de como está tratando la introspección en sus personajes Marvel. Rota, llena de ira, con ansias de venganza, no es un copia y pega del noble T’Challa, y eso me ha gustado. En la imperfección, el crecimiento.
¿Qué depara para el futuro del MCU lo acontecido en ‘Wakanda Forever’? Es la eterna pregunta a la que nos están sometiendo en esta fase 4. Es difícil seguir el plan de Feige y los suyos, pero algunas cuestiones se van despejando. La principal es la presencia de Vallentina Allegra Le Fontaine , que para quien se lo haya perdido, será la creadora de los Thunderbolts. Ya en ‘Falcon and the Winter Soldier’ (las series de D+ ayudan a ampliar el universo de las películas) empezó su reclutamiento de soldados para la causa, y en ‘Wakanda Forever’ nos muestra algunas pinceladas de su plan.
En resumen, si es que se puede resumir, ‘Wakanda Forever’ tendrá fervientes seguidores pero detractores también. La simplicidad ya no es parte del MCU, las historias van a ser cada vez más complejas y se puede abrazar o bajarse del carro. Es cuestión de gustos, pero nadie le puede negar a esta película el buen puñetazo en el mentón del colonialismo imperialista. Saldrán las críticas a la película, seguramente en las llamadas redes sociales, todas pertenecientes a empresas americanas. Pero a un servidor, ‘Wakanda Forever’ le ha gustado y mucho.