La 95 ceremonia de los premios Oscars han coronado a Todo a la vez en todas partes como la mayor fricada jamás nominada. La guinda que le quedaba a la película más premiada de la historia. Y no olvidemos que es una comedia de ciencia ficción. Maravilloso.
Los Oscars han recuperado por fin el brillo que había estado perdiendo. Una escenografía sencilla pero vistosa, un maestro de ceremonias resultón (no memorable, pero sí guapete), una puesta en escena eficaz y sin tonterías como entregar determinados premios a puerta cerrada (el año pasado dieron nada menos que montaje y fotografía antes de comenzar la ceremonia).
Los Daniels se convierten con su segunda película en la tercera pareja en ganar el Oscar a mejor dirección (tras los Cohen y Jerome Robbins & Robert Wise). También han colado a tres actores premiados por la misma película. Esto sólo había pasado con Network y con Un tranvía llamado deseo. También es la tercera vez que una comedia gana dirección (tras The artist y La la land) y la segunda que lo hace una de ciencia ficción (tras La forma del agua).
Tras ganar película, director, guión y tres de los actores; Todo a la vez en todas partes es, oficialmente, la película que más premios importantes ha logrado en 95 años de Oscars (y una marca muy difícil de igualar).
Los cuatro actores han ganado en su primera nominación. Las dos actrices superaban los sesenta años (cuando la media es de 36 años). Michelle Yeoh logra ser la primera oriental en ganar y la segunda actriz no blanca. Brendan Fraser consigue romper la maldición de los hijos pródigos. Las estrellas comerciales que desaparecen y vuelven con una gran interpretación son nominadas pero nunca ganan (como Stallone, Mickey Rourke, Eddy Murphy, Michael Keaton y Bill Murray)… hasta ahora.
Empezaron muy alto. Los primeros premios, actores de reparto, pueden ser los momentos más emotivos de la gala. En cierto modo gastaron dos balas de cañón demasiado pronto, pero desde luego que así es como se empieza con poderío. Ke Huy Quan directamente se llevó una ovación en pie, que puede parecer exagerado hasta que sabemos que llevaba veinte años sin trabajar porque no encontraba papeles. Así, sí. Lo que se nos pasó por alto con la emoción de ver a Jamie Lee Curtis fue la reacción de Angela Basset… Un poema. Como hubiera dicho la mítica Paloma Cuesta: «Las caras, Juan, las caras».
Alemania consiguió su cuarto Oscar con la tercera adaptación de la novela de Erich Maria Remarque «Sin novedad en el frente». Por tanto, podemos decir que ha ganado un remake el Oscar a película internacional. Se llevó también música, fotografía y dirección artística. Ha gustado la peli.
Diane Warren volvió a perder el Oscar a mejor canción… y van 14. Lo que pueda parecer crueldad hay que ponerla en perspectiva: Realmente jamás ha tenido opciones, nunca ha tenido una canción que fuera favorita.
Sus dos nominaciones más importantes fueron por Because you love me (Íntimo y personal) y Don’t wanna miss a thing (Argameddon), pero el resto de sus temas han sido un poco «de relleno». Desde luego, RRR tenía la canción del año y una de las escenas musicales que pasarán a la historia. La representación era lo más esperado de la noche y, calcando lo mismo que se hacía en la película, ya es por derecho una de las actuaciones míticas de la historia de los Oscars. Se ha convertido en la cuarta canción no en inglés que gana y la primera en télugu.
Damien Chazelle había conseguido que todas sus películas fueran premiadas… hasta Babylon, que se ha ido de vacío. Curioso el fenómeno Chazelle, creó una de las películas más importantes de la década y parecía la esperanza blanca del cine. Sin embargo, se ha ido desinflando con cada título que ha ido después hasta convertirse en un director lindando con la irrelevancia.
Maverick ganó sonido (que había perdido Top Gun) pero perdió canción (que sí ganó la película original).
Por último, la acumulación de premios (algo que hacía tiempo que no se veía) ha dejado sin nada a Los Fableman, Elvis, Babylon, Almas en pena de Inisherin y Tár. Que la película que ganara se hiciera con 6 premios más no se veía desde 2008 desde los 8 de Slumdog Millionaire.
¡Nos vemos el año que viene!