El aclamado actor Johnny Depp persiste en sus problemas personales y ahora Mandel Company se suma al carro de sus detractores.
Después de acumular una serie de películas sin pena ni gloria, Johnny Depp protagonizó uno de los escándalos más notorios del año pasado tras la ruptura con su mujer Amber Heard, que le pidió el divorcio y le acusó de malos tratos. Al final ambas partes llegaron a un acuerdo económico, aunque ahora al actor no está para regalar billetes.
Tras demandar a su empresa gestora de fondos, Mandel Company, por una supuesta mala praxis -que desembocó en decenas de millones de dólares perdidos-, el tiro le ha salido por la culata y ahora es la propia empresa quien ha cargado contra el actor mediante otra demanda, exigiéndolo 560.000 dólares.
«TGM ha hecho todo lo posible durante los últimos 17 años para proteger a Depp de sí mismo y para mantener su solvencia financiera» […] «Durante años, TGM informó en repetidas ocasiones a Depp de que estaba viviendo por encima de sus posibilidades, y le urgió a gastar menos y vender ciertas pertenencias caras e innecesarias para liquidar préstamos, pagar impuestos y gastos».
En la demanda, la empresa saca a la luz diversos trapos sucios y despilfarros del actor. Además de los más de 7 millones de dólares que ha tenido que pagar supuestamente a su ex-mujer por el divorcio, se suman 75 millones en adquirir, reformar y amueblar 14 residencias alrededor del mundo, junto con mantener personal de seguridad a tiempo completo y 45 coches de lujo. Junto con esto, se suman otros muchos despropósitos como gastar 3 millones de dólares para disparar las cenizas de un amigo desde un cañón.
El actor tendrá que responder a estas alegaciones y la empresa está dispuesta a llevarlo a juicio. De momento, lo único que tenemos claro es que al actor está pillado hasta las orejas. ¿Qué opináis?
