Crítica de Criminal (2019): ¿112, Policía?

criminal

Viernes 20, Criminal llega a Netflix, el experimento de la plataforma resulta ser todo un acierto en su construcción inusual para una serie clásica.

Anuncio; Criminal, una serie rodada con varios países de telón de fondo, 3 capítulos en cada uno de ellos, con un director para cada uno de esos trípticos, con una temática compartida, y con actores de primer orden. Compro.

criminal

Dejemos a un lado su planteamiento creativo; la serie no juega a eso, no le interesa crear una narrativa arriesgada, su idea llama la atención en un primer acercamiento al producto, pero más allá de eso no hay nada que resulte aventurado, en términos de estructura Criminal es absolutamente conservadora. ¿Es esto algo malo? No. Sus virtudes son otras. Quizá la idea de su creador gustó a Netflix porque hace de una única serie un producto plurinacional, con todo lo positivo que ello conlleva en los diferentes países donde ocurre la historia en potenciales suscriptores.

Quitándonos de encima al elefante en la habitación queda la serie, una antología de facto, que juega muy bien sus cartas, y que atrapa en su tela de araña a cualquiera que le interese mínimamente el tema.

criminal

45 minutos donde encontramos introducción, nudo y desenlace; una historia cerrada por capítulo con una mínima continuidad a través de los ojos de los policias de detrás del cristal de la sala de interrogatorios. Eso es la serie, clásica; en el mejor sentido. Decide componer una historia por episodio con una trama directa y sin vacilación, con una dirección y escritura absolutamente teatral; el 95% del metraje ocurre entre las mismas 4 paredes.

En la parte española nos encontramos 2 policias, los interpretados por Emma Suárez y Álvaro Cervantes, jefa y subordinado; con una relación sentimental de por medio, la cual es de algún modo el catalizador emocional de la trama que se da durante el interrogatorio. Carmen Machi, Inma Cuesta y Eduard Fernández les dan la réplica en cada capítulo respectivamente; los 3 estupendos. Porque amigos, Criminal es una obra de teatro, y aquí lo importante son el guion y la dirección de actores. Netflix vuelve a dar en el clavo.

Crítica de «Cristal Oscuro: La Era De La Resistencia»